Dentro de unos dÃas estaré de nuevo en el terreno, junto al equipo que ya está trabajando en Kilis, una pequeña ciudad cerca de la frontera Turca con Siria. AllÃ, un numeroso grupo de refugiados sirios espera que el conflicto en su paÃs termine y que la Paz les permita regresar a sus casas y reconstruir sus vidas.
Pero con un conflicto sin muchos visos de tener un final a corto plazo, y con muchos problemas de acceso a recursos básicos, la población siria refugiada en la mayor parte de los paÃses limÃtrofes con Siria, necesita mucho apoyo por parte de la comunidad internacional. En breve os podré contar de primera mano cómo es la situación en la que viven.
Por mi parte, y a pesar de que ya estoy echando de menos a los que más quiero, tengo ganas de llegar al terreno para aportar mi granito de arena en todo lo que pueda hacer. A ellos, a los que más quiero, les debo también el ser fiel a mi mismo y continuar el camino que comenzó hace ya más de 5 años en Guatemala, sabiendo que siempre estoy pensando en ellos, porque allá donde voy siempre están y estarán conmigo.
Hasta pronto!